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El hijo de dios, de Fernández y Girod

El suelo de tierra fragmentada, seca de tanto calor, no impide que los habitantes de Betania, un pueblo detenido en el tiempo, se arriesgue a jugar al fútbol, a pesar de su prohibición. Este pueblo, bajo el poderío de Pilatos (arquero y comisario) en complicidad con el párroco local (referí ocasional) juega todos los ...